En la tarde de ayer el ex mandatario cubano Fidel Castro recibió a Allan Gross, ex contratista norteamericano que sufrió prisión en Cuba por introducir material de telecomunicaciones.
El encuentro. efectuado en la residencia del lider, conocida como Punto Cero, se prolongó por mas de nueve horas, en las que se trataron temas de importancia y el lider comunista cubano “pudo practicar su inglés” dijo Gross, muy recuperado aunque aún sin dientes.
En la animada charla Gross pudo probar las ricas croquetas de Dalia, esposa de Castro, famosa por las de bacalao, predilectas de muchos presidentes latinoamericanos. Dalia, con su natural modestia se excusó “quisiera darle otra cosa, pero es que aun no han llegado los mandados”
También hubo un momento para el recuerdo, cuando apareció Bartolo Melaez, sargento a cargo de Gross cuando estuvo en prisión. Ambos se fundieron en un cariñoso y emotivo abrazo.
No trascendieron más detalles del encuentro, salvo que Gross invitó al ex mandatario a visitarlo en su casa en Washington, donde Judy le brindaría un trozo de pastel de manzana horneado por ella misma.
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