Zona 0
Abril 11 del 2015
´´No hay virtud con impiedad ´´
Félix Varela
Estimado Rev. Manuel
Morejón y Equipo de ´´Alianza Cristiana´´
Hace
algún tiempo leí la siguiente anécdota. Se dice que en una ocasión un
inquisidor murió en el momento que llegó a su casa después de haber quemado a
un hereje en la hoguera. Y como todos los hombres; ambos se presentaron ante
Dios.
En
la ocasión, Dios decidió inquirir de ellos. ¿Qué creían acerca de él?
En
ese momento el hereje comenzó a referir todos los principios aprendidos en su
vida en la tierra sobre lo que creía de Dios. Justamente los mismos por los que
fue juzgado y condenado a la hoguera, pero sin embargo, Dios no se reconocía en
sus descripciones.
Tocó
el turno al inquisidor quien, para sorpresa de todos; después de hacer una
disertación teológica de su ortodoncia;
Dios tampoco se hallaba dentro de las descripciones que aportaba el inquisidor.
Seguidamente
comenzó un debate donde cada uno trataba de aportar sus mejores conceptos sobre
Dios y sin embargo, ninguno de los dos lograba satisfacer la pregunta de Dios sobre su persona, por lo que a cada momento,
Dios se preguntaba extrañado si era dementes o lunáticos. Y como ya pasaba el
tiempo y caía la noche, Dios decidió usar un recurso máximo. Mandó a cada uno
de sus ángeles a que les trajera el corazón de cada uno de ellos y para
sorpresa de todos ninguno de los dos tenía corazón.
¿Y
por qué cito esta anécdota que nos transmite una verdad tan sólida como una
roca?
Porque
en nuestra vida hay valores y acciones que nos identifican; independientemente
al medio en que nos encontramos, o nuestra propia forma de pensar.
Un
Obispo Luterano señaló en una ocasión que ´´Los
cristianos son personas que con palabras y los hechos; demuestran que Dios
vive´´
El
perdón ha sido uno de los temas más dialogados en los últimos 20 días.
1.
En fecha 28 de Marzo, la esposa de un muy
querido amigo quien ha sido como un padre en todo este tiempo de tribulación y
que también hace 50 años atrás
padecieron por circunstancias similares, nos exhortaba a perdonar y dejar las
amargas experiencias en el pasado…
2.
En fecha 30 de Marzo, un muy querido amigo. Uno
de los cristianos más auténticos que he podido conocer; desde La República Dominicana me escribía: ´´Solo recuerdo las palabras del Señor
´´perdónalos´´, las palabras de Esteban ´´perdónalos´´, las palabras del Padre
Nuestro ´´Si nos perdonamos´´… Que fuerte es eso, pero es algo
sobrenatural; sino viene de arriba no podremos hacerlo.
También recuerdo a Nelson Mandela, muchos años
presos, y en solitaria… luego presidente!!! Y perdonó!
Si perdonamos confirmaremos la libertad en Cristo…
3.
El día jueves 2 de Abril se presentó un alto
oficial en representación del Ministerio del Interior a fin de entrevistarse
conmigo.
La actitud de este oficial fue muy diferente a las
que antes se habían presentado en fecha 29 de Diciembre 2014, martes 3 de
febrero 2015 y jueves 19 de febrero 2015
Estos antes citados solo trataban de proporcionar
una ´´ficticia´´ satisfacción a fin de que se les firmara un reporte por lo que
toda vez, limité cualquier diálogo con dichos oficiales.
Al respecto, la actitud de este último fue muy
diferente. De hecho no traía tantos informes ni respuestas pre-definidas. Más
bien vino con la intención de establecer un diálogo y tomar nota de lo que
entendía, eran cuestiones urgentes a considerar. El diálogo fue respetuoso por
ambas partes donde aún, en el momento de transmitir mis inconformidades y
–entiendo- atropellos y hostilidades que han sido frecuentes en mi proceso,
acentuando con respeto y firmeza además de demostrar con sobrados Hechos
Ocurridos; que yo pudiera interpretar todos estos actos como un perjuicio
contra mi persona de lo que él, como oficial del Ministerio del Interior y en
representación del mismo, debía ser consciente de ello. El oficial, después de
escucharme y tomar notas, empezó por disculparse por nombre del Ministerio del
Interior y consultarme sobre mi disponibilidad de perdonar…
4.
El 10 de Abril, un pastor y amigo muy querido;
por medio de una carta donde me estimula a la curación anterior, me exhorta
también a dejar todo atrás y perdonar…
5.
Hoy en la fecha que encabeza esta carta, mi
esposa me ha comentado sobre un mensaje, en el Blog de ´´Alianza Cristiana´´
donde de forma sencilla, ilustra una pecera con un bello pececito pero en
breves líneas me deja un mensaje profundo: ´´Puedes estar preso, por obligación
o por gusto, y tu mundo cambiará debido a la opción que escojas´´
Al
respecto, he de tomar todas estas consideraciones como un estímulo a tomar una
decisión. Pienso que Dios puede que espere alguna respuesta definida.
Él
nunca se ha callado. Nunca lo ha hecho. Hemos sido nosotros con nuestra sordera
espiritual, quienes nos ha parecido, siempre al calor de un conflicto, una
crisis, que más que callado se ha ausentado. No ha habido error más grande que
este. Aunque muchas veces no lo entendamos, Dios nunca ha faltado.
No
faltóaquel 5 de Septiembre del 2012 oscuro cuando a las 6:00 AM, la
casa donde habitaba con mi esposa e hijos de vio de facto, invadida de
oficiales de la Seguridad el Estado en el operativo donde quedé detenido.
No
faltó Dios cuando entré a la
Unidad 100 y Aldabó; a la celda 321 con el número 53761. Una celda de 2 metros
de ancho por 3 metros de largo, con puerta cubierta herméticamente, ducha y
letrina incluida y otras 3 personas totalmente desconocidas que compartían el agosto y poco espacio de
nuestra celda y que se fueron hiendo en lo que otros entraban en toda mi larga
estancia; y una estrecha y semi cubierto con una placa de concreto, hendija en
la pared, que a mi juicio no cumplía las características de ventana, pero por
la que nos entraba algo de oxígeno y luz natural, Podría sentirme dichoso!!,
dicho sea de paso.
Recuerdo
que cuando entré a esta celda con semejantes condiciones, una de las cosas que
más me llamó la atención fueron los escritos en la pared. Algunos transmitían
un mensaje: ´´no cambies días por años´´… ´´De aquí se sale ¿Cuándo? No lo sé…;
entre otros tantos nombres que más me impactó e impresionó fue el que estaba
justamente a mi cabecera donde dormía: ´´Yohandri, Marianao, 80 días Droga, no
hablé´´
A
ser sincero, sentía escalofríos cuando leía los días que vivió esa persona en
semejantes condiciones.
Nunca
dudé que Dios, mi Señor en quien creo `profundamente, le faltaba poder ni
determinación para sacarme cuanto antes de este terrible lugar. Una de las
cosas que inicialmente más observaba eran las rayitas que se marcaba en la
pared donde quedaba el testimonio de la estancia de personas que habían pasado
por esa celda. Los que más oscilaban entre 40 y 60 días. El testimonio de los
primeros 3 presos que compartieron la celda en la que me pusieron, la sanción de asfixia que sentían después
de los primeros 20 días por lo que la gran mayoría de los que compartieron mi
estancia no duraron más de 35 días
donde después de puntualizar todos los detalles del caso a fin, por lo
general; las autoridades decidían el traslado a prisión.
Esta
fue mi primera crisis.
Con
la convicción y sin dudar del poder y la soberanía de Dios, pensé que mi
estancia no debía dudar más de 40 días. Casi que se lo imponía a Dios en mis
oraciones!!, hasta que finalmente llegó el día 40. Pasó la mañana, pasó la
tarde, llegó la noche y aún tarde estuve
en vela pues firmemente creía que Dios podía- y me sacaría- ese día,
hasta que finalmente me rindió el sueño.
Al
siguiente día, junto al fracaso de mi proyección había una cuestión que
definir. Me pregunté, ´´Y bien Raudel, ahora que tu programación
falló, ¿Qué piensas hacer?´´
Fue
imperativo reflexionar. Esto conllevó además a una revaloración de mi actitud
como cristiano, pero entendí que mi proyección y perspectivas eran inadecuadas.
Decidí seguir creyendo en mismo Dios omnipotente y Soberano que es Señor de mi
vida pero, sin embargo, mi oración cambió.
En
ese momento, más que pedirle a Dios que me sacare de ese lugar; mi oración era
que me diera las fuerzas para vivir cada día, las difíciles circunstancias que
me tocaba vivir…y Dios nunca me falló.
En
ese momento desconocía que aún me quedaban 93 largos días a enfrentar y vivir
en estas condiciones, Pero Dios no me falló ni un solo día.
Ya
pueden imaginarse que mi impresión cambió radicalmente a los 75 días cuando,
cada vez que me despertaba mi vista chocaba de inmediato con el mensaje dejado
por Yohandri y sus ´´80 días´´. Dios nunca faltó cuando en esta
larga estancia mis enfermedades me recordaron los mal estales de los que eran
capaces de infligirme en mi salud.
Dios
nunca faltó cuando cerca de los 80 días me reventó la crisis nerviosa
de la que hoy aún quedan algunas marcas en mi salud.
Dios
nunca faltó cuando en medio del hambre, mis dolencias, mis
preocupaciones, en medio de la opresión y angustias; trataban de importunar la
serenidad y requería para enfrentar cada día difícil de mi vida.
Dios
nunca faltó cuando el 15 de Enero 2013 pisé por primera vez como un
preso más; la prisión de Valle Grande.
Después
de ser pelado a raspe, aun sintiéndome físicamente mal de salud; cuando entré
aquel 15 de Enero 2013 en la tarde dentro del edificio del penal de esta
prisión, solo pude hacerme dos preguntas, ¿Qué hago aquí?, ¿Cómo he llegado
aquí?...pero Dios nunca faltó.
Dios
nunca faltó cuando mi esposa, al percatarse de que mi salud en el penal de Valle Grande
iba de mal en peor; hizo las reclamaciones pertinentes en unión de otros
pastores a fin de que se me hospitalizara.
Dios
nunca faltó todo el largo tiempo de mi ingreso en el Hospital donde en
muchas ocasiones las circunstancias se tornaron bien difíciles.
Dios
nunca faltó cuando en el acto del juicio oral, me concedió la sabiduría
para que en conjunto de mi abogado, hacer frente a las acusaciones falsas y
manipuladas de la fiscalía.
Dios
nunca faltó cuando en el ignominioso día que quedará registrado para mi
historia como ´´La Canallada del 13 de Mayo del 2014´´, fui trasladado en la
noche y de la peor forma; sin previa alta médica; a la prisión de Máxima
Seguridad y Nacional, Combinado del Este, donde desde mi llegada en la noche
tarde del 13 de Mayo y bajo constantes maltratos por haber sido acusado
falsamente por ´´alguien´´ de ser un fugitivo capaz de organizar fugas masivas;
hasta la tarde del día 14 donde, después de 5 cambios diferente, vine a parar a
la Compañía 3302 del piso tercero norte del edificio 3 del Combinado del ESTE.
Dios nunca
faltó cuando tuve que pasar mi segunda noche en el Combinado del Este
durmiendo en el suelo de la compañía por no haber una disponible para mí y
casi; dadas las urgencias del día anterior; sin condiciones higiénicas donde
además, las autoridades se encargaron en un intento bien definido de mantenerme
incomunicado.
Dios
nunca faltó cuando ante semejante atropello, mi esposa en unión al
entonces Rector del Seminario Bautista de La Habana y un grupo de amigos; pastores y hermanos comprometidos con la fe,
levantaron su voz en protesta ante semejante atropello y no escatimaron nivel
alguno ante el cual elevar su inconformidad cual fue eco de mi indignación y
humillación dando como resultado mi traslado en fecha 23 de Mayo al Hospital
Carlos J. Finlay; a la sala del Penado de la Seguridad del Estado donde se me
identificó con el número 261.
Dios
nunca faltó cuando en los primeros días de Agosto me vi de regreso al
edificio 3, piso tercero norte del Combinado del Este, donde tuve que convivir
con todo tipo de persona; pero Dios me dio gracia no solo para convivir con
ellos sino también para amarles, respetarles, escucharles, ayudarles, ganar su
respeto y muchas veces cuidarles cuando estaba enfermos.
Quizás
es por eso que aunque para las autoridades del lugar era solo conocido como
´´Bringas´´, un hombre del que había que y tener mucho cuidado; para los presos
comencé a ser conocido como el ´´Padrino´´ y esto no porque se me comparar con
el personaje principal mafioso de La Zaga del mismo nombre de Francis for Capola,
no; sino porque en alguna forma vine a ser como el padre que la gran mayoría de
esos muchacho no conocieron.
Dios
nunca faltó y su gracia abundó cuando aún medio de las carencias y
limitaciones; con una comida bien sencilla, pudimos celebrar nuestra Navidad el
2014 pasado dónde además, se pudo compartir la Palabra del Señor, pude hablar
sin rencores ni amarguras sobre lo que significaba la Navidad y después pude
orar por todos ellos y sus familiares. Me siento muy agradecido a DIOS por todo
esto.
Dios
nunca ha faltado cuando rompiendo el año 2015 comencé; con la ayuda de
la Providencia Divina, a elevar mi voz a través de mis correspondencias
públicas donde, no estoy haciendo política a favor o en contra de nadie; no
estoy difamando la persona de nadie. Estoy denunciando las manipulaciones, las
mentiras, las violaciones cometidas y los atropellos de los que he sido objeto
y de los que en mis cartas he hecho mención con pruebas fehacientes de los
mismos.
Hoy
aún me siento en medio de un conflicto del que no espero una solución inmediata.
Nunca
he dicho que soy inocente de lo que originalmente se me acusó; Una Actividad
Económica Ilícita, donde quedando muchos aspectos no del todo definidos, aun
así; voy a aceptar sin mayores cuestiones mi participación e implicación en la
misma.
Donde
no coincido, ni lo haré es, toda vez
que las autoridades en cuestión sigan publicando y afirmando que yo he creado
un grave daño al país donde como respuesta toda vez; yo seguiré preguntando
¿Dónde está el Daño?
Dicho
daño que no fue demostrado ni presentado con pruebas fehacientes, ni en el
proceso de instrucción; ni en el acto del juicio; ni aun quedó explícito y
concreto en la Sentencia del Tribunal Provincial ni del Tribunal Supremo de la
República de Cuba.
No
coincido ni lo haré, toda vez que las autoridades de refieran e cuanto
a mi persona, como he catalogado oficialmente ´´Un alto peligro social´´.
No
coincido, ni lo haré toda vez que la violencia; los maltratos; las
manipulaciones; las falsas acusaciones; los
procesos ficticios y las mentiras han sido los medios utilizados por las
autoridades a fin de callarme a bien, dar un escarmiento. Este último término
muy cuestionable ante todo concepto de democracia; derecho y justicia.
No
coincido, ni lo haré cuando se ha esgrimido como justificante un grave
daño del que no se ha comprobado ni aportado pruebas fehacientes a fin de
hacerme cumplir casi o total prisión, la sentencia emitida por el tribunal.
No
coincido, ni lo haré, toda vez que a los atropellos, manipulaciones,
falsedad, injusticia, excesos y falta de transferencia se le quiera cubrir o
dar una caracterización que no sea otra que la que corresponde.
Esto
hoy no es admisible para mí ni como cristiano, ni como Bautista, ni como
cubano, ni como hombre.
Hoy
ya no se trata de un rencor por mi propia experiencia personal; creo que en
asunto es mucho más profundo.
No
se trata de política; más bien es un asunto sobre lo real y verdadero.
El
teólogo Floreal Ureta cuando aborda la
eclesiología en su libro ´´Elementos de la Teología Cristiana´´, expresa
muy acertadamente: ´´A veces ha sido una iglesia misma la que se ha ido
encerrando en sus liturgias, su culto, sub teología y sus esperanzas
escatológicas, hasta resultar una cosa extraña a su ambiente´´.
Tengo
que aceptar con profunda tristeza que no falta verdad a lo antes dicho.
Pienso
que la pregunta que hemos de hacernos es: ¿Cómo se pueden desencadenas fuerzas éticas capaces de influir en nuestro
medio social y hacerlas eficaces y aplicables?
Durante
mucho tiempo nos hemos escudado…; me he escudado detrás del principio
Universal de Separación de Iglesia y Estado.
He
tratado de cerrar los ojos por mucho tiempo a todo lo que empeña nuestro propio
presente social y que pudiera amenazar
mi propia seguridad y bienestar personal, con la esperanza de que mañana, Dios
haría un milagro (Del que no cuestiono que pueda ser efectivo), mientras yo,
además de cerrar mis ojos, cruzaba mis brazos en manifiesta actitud que las
cuestiones y desgracias de mi prójimo no tenían nada que ver conmigo
He
tenido suficiente tiempo y oportunidad para convivir con lo considerado, ´´Lo
peor de la Sociedad´´ y sus propias desgracias y tristezas.
He
podido y hoy aún pido perdón a Dios por mi actitud.
En
mis dos anteriores cartas publicadas en el ´´web site´´ de La Alianza
Cristiana, comenzó por confesar los pecados de mi pueblo cubano histórico del
que tengo parte por considerarme cubano.
Confesé
además que he pedido perdón por todos los atropellos cometidos, muchas veces en
nombre de Dios; en nombre de la Cruz de Cristo por ese pueblo Cristiano
histórico espiritual del que me siento parte por considerarme uno más, redimido
por la Sangre de Cristo y del que formo parte de un solo pueblo que mantiene
una sola fe universal.
Admiro
a personas como Martin Luther King- Jr. Quien emprendió su abierta protesta
contra las injusticias de su tiempo y que al fin pagó siempre basándose en el
principio cristiano del pacifismo y el total rechazo a cualquier forma de odio que pudiera sentirse contra aquellos
quienes injustamente les oprimían.
Su
vida y principios han dejado más que una enseñanza; ha dejado un mensaje para
los cristianos de todos los tiempos.
Este
es, el compromiso irrevocable de Dios;
de los cristianos cualquiera que sea el apellido que llevan, con el nombre y su
historia.
Así
lo vieron los teólogos de Westminster; así lo vieron aquellos cristianos que
firmaron la Segunda Confesión Bautista de Fe de Londres de 1689.
Todos
ellos estaban convencidos que relegar el cristianismo solo a la espera
espiritual por una mala interpretación del principio de Separación de Iglesia y
Estado, era en últimas instancias destruirlo.
Sobre
la cuestión si seré capaz de perdonar; es justo añadir que el primer día de mi
arresto; en la noche mientras el instructor me vaticinaba en abierta amenaza el
tiempo y las circunstancias que me tocarían vivir, me atreví a decirle que en
mi fe, el hombre más poderoso del mundo estaba bajo la mano de Dios.
Hoy,
a pesar de todo lo antes narrado, sigo creyendo los mismos. Nadie ha podido
persuadirme de lo contrario. He sido fiel testigo en casi tres años de prisión
que aun ante los atropellos, las hostilidades, las opresiones, las violaciones
de mis derechos y en muchas ocasiones, los maltratos; La Gracia de Dios ha
sobreabundado en mi vida.
He
conocido muchos oficiales del Ministerio del Interior que han granado no solo
mi respeto sino también mi admiración.
Siempre
me he esforzado por ver; aún detrás de un uniforme, un cargo o cualquier otro
tipo de jerarquía; al hombre que se encuentra en sitio, sin la necesidad de
dejarme llevar por otras cosas que puedan distraer mi mente.
Es
curioso además, no conozca los nombre de la gran mayoría de estos hombres sin
embargo, es muy fácil distinguirlos entre miles, no porque hayan hecho algo
extraordinario.
Lo
único que han hecho, en el pleno ejercicio de su deber; ha sido proceder con
honradez, decoro, respeto y humanidad; algo que
casi está en peligro de extinción.
Desde
hace casi tres años solo he visto a mis hijos no más de una 15 veces donde solo
he compartido con ellos no más de 72 horas en total.
En
el momento en que escribo estas líneas va a ser casi un año en que no les veo.
Esto
no porque las autoridades me lo hayan impedido. Ha sido mi elección evitarles
angustias por lo que he optado que en su fantasía infantil, ellos piensen que
su papá está en cualquier otro lugar menos en prisión. Para mí es suficiente
llevar esta carga como para hacerles partícipe a ellos de la misma.
Entre
tanto, hoy sigo pensando y creyendo fielmente el mensaje que transmitieron
aquellos tres jóvenes judíos que nos narra el libro de Daniel, capítulo tres
cuando se vieron cuestionados por el hombre más poderoso de su tiempo a romper
su fidelidad a Dios.
Ellos
respondieron al rey y testificaron al mundo que hoy lee esta historia:
´´No es necesario que te respondamos sobre
este asunto. He aquí nuestro Dios a quien servimos puede librarnos del horno de
fuego ardiendo; y de tu mano, oh rey, nos librará. Y si no;´´… Se atrevieron mucho más. Le dijeron al hombre más
poderoso de su tiempo, Y si no fuese así...; Nada cambiará.´´
A
nuestro alrededor podrán moverse diariamente los descorazonados herejes i
inquisidores. Podremos observar como muchos se cruzan de brazos y cierran sus
ojos entre las adversidades de su prójimo. Podemos vivir días grises que
lleguen imprevistos a nuestras vidas con
la radical voluntad y fuerza de borrar toda huella de los recuerdos pasados de
la manifiesta bondad de Dios. Podremos también un día ser víctimas de la
envidia, la sabiduría, las miserias humanas de aquellos que, por ostentar un
poder temporal se sienten como dueños de nuestra vida y futuro.
Podremos
incluso un día vernos enclaustrados en lugares sin espacio, sin comunicación;
reducidos a solo estar acostados o sentados; podremos vivir días largos sin ver
la luz del sol, las estrellas de la noche
Podrá
ser también que un día seamos víctimas del hombre, enfermedades, angustias, la
ausencia de lo que amamos.
Podrá
ser que nos veamos un día durmiendo e incluso tratados como el peor de los
criminales; pero aun así si nuestra fe persevera en nuestro Señor, si
perseveramos y nos aferramos al que fue despreciado por los hombres y
torturado, tratado y crucificado como un criminal.
Si
logramos, tomados de su mano; enfrentar estas desgracias a muchas otras que
puedan sobrevenir; podremos decir como esos tres jóvenes judíos; firmes,
serenos, con fe inquebrantable; aun ante el hombre más poderoso del mundo
Nada
Cambiará!!!!!
Disculpen
lo extenso de mi carta
En
Cristo Victorioso…..Raudel García Bringas