Por Pr. Manuel A Morejón Soler El Vedado, La Habana.
Antecedentes históricos
El Día de las Madres es una festividad que se
celebra en honor de las madres. Fue creado por Julia Ward Howe, en 1870,
originalmente como un día de madres por la paz, que luego se convirtió en un
día para que cada familia honrase a su madre pero finalmente ha sido aceptado
como festividad en muchos lugares del mundo.
La tradición griega
Las primeras
celebraciones del “Día de las Madres”, se remontan a la antigua Grecia, donde
se le rendían honores a Rea, la madre de los dioses Zeus, Poseidón y Hades.
La “Encyclopedia
Britannica” da la siguiente definición:
"Fiesta
derivada de la costumbre de adorar a la madre en la antigua Grecia. La adoración
formal a la madre, con ceremonias a Cibeles, o Gea, la Gran Madre de los
Dioses, se ejecutaba en los idus de marzo por toda Asia Menor" (1959, tomo
15, pág. 849).
La tradición romana
Igualmente
los romanos llamaron a esta celebración Hilaria cuando la adquirieron de los
griegos. Se celebraba el 15 de marzo en el templo de Cibeles y durante tres
días se realizaban ofrendas.
La tradición católica
Los
católicos transformaron estas celebraciones para adorar públicamente a la
Virgen María, la madre de Jesús. En el santoral católico el 8 de diciembre se
celebra la fiesta de la Inmaculada Concepción, fecha que los panameños
adoptaron para la celebración del Día de la Madre.
En
Inglaterra hacia el siglo XVII, tenía lugar un acontecimiento similar, también relacionado
con la Virgen, que se denominaba Domingo de las Madres. Los niños concurrían a
misa y regresaban a sus hogares con regalos para sus progenitoras.
Tradición judía
La tradición rabínica con respecto al
cuarto libro de la Biblia (Números 30:2), expresa que los bienes ofrecidos a
Dios no se pueden usar para otro fin, pero
Jesús insiste en que los mandamientos
de Dios son para bien de los seres humanos, asimismo acusó a los escribas y
fariseos de invalidar la Palabra de Dios por causa de
la tradición. (Mateo 15:1-9)
Una madre tiene un lugar
muy especial para Jhvh, el mismo la honra con el primer mandamiento con promesa
como estatuto perpetuo, para honrarla en cada momento, cada día y por siempre,
no solamente un día convertido en una feria comercial.
"Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se
alarguen en la tierra que Jehová, tu
Dios, te da”. (Éxodo 20:12)
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