Enviado por ei en febrero 20, 2013 – 1:57 am
El pastor Humberto Noble Alexander (1934-2002), de la Iglesia Adventistas del Séptimo Día, es obligado a detener el Oldsmobile 1957 en que regresaba a casa, luego de dar sermón en Matanzas, para responder a unas preguntas que, según dijeron las autoridades, tomarían unos cinco minutos responderlas. El pastor acabaría pasando 22 años de cárcel bajo cargos de haberse complotado para asesinar a Fidel Castro con bombazo en su avión ejecutivo. Hacia 1984 saldría en libertad —junto con otros 25 presos— por obra y gracia del reverendo Jesse Jackson. Con ayuda de la escritora y predicadora Kay Rizzo daría a imprenta su autobiografía I Will Die Free (Pacific Press Publishing Association, 1991, 189 páginas). En la prisión de Isla de Pinos Noble Alexander prestó servicios religiosos a creyentes de diversas denominaciones, quienes lo llamaban simplemente «El Predicador» y superaron las diferencias de credo entre sí.
La información aparece en el Blog de Emilio Ichikawa.
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