Por
Pr. Manuel A Morejón Soler, El Vedado, La Habana.
Deshecha lo malo.
Napoleón trató
de establecer un reino por medio de la fuerza de sus ejércitos. Lo mismo quiso
hacer Alejandro el Grande, Julio César y en épocas más recientes, Mussolini con
el fascismo e Hitler con el nazismo. Tampoco el bloque comunista de Europa del
Este pudo prevalecer. Los ejemplos anteriores nos dan una buena medida de que
todas las cosas egoístas e indignas siempre desaparecen y el castrismo no será
una excepción de la Historia.
Retén lo bueno
Cuando llegamos
al plano del amor entonces nuestra obra puede soportar el fuego de la prueba y
cambiarlo todo.
Ghandi, aunque no era cristiano, sí profesaba un profundo amor por la
causa que defendía y su vida es un ejemplo de pasión digno de imitar. Se le
considera un triunfador y su existencia marcó el sendero para muchos líderes
mundialmente. Se le conoce en la historia como el Padre de la Nación de la
India, aludiendo a sus acciones que contribuyeron a la liberación hindú del
gobierno colonial inglés. Siempre predicó y aplicó la resistencia no violenta.
Los indios lo llamaron a Ghandi Mahatma, que significa Alma Grande.
En el propósito de liberar a su pueblo, enfrentó fracasos, frustraciones,
intolerancia e incomprensión. Pero no decayó jamás su fe y optimismo. En
conjunto pasó siete años en prisión debido a sus actividades políticas. Creía
que era honorable ir a la cárcel por una causa justa. Más de una vez Ghandi
recurrió al ayuno para sensibilizar a sus seguidores sobre la necesidad de ser
no-violento.
Con Jhvh todo.
Hay dos formas de luchar por
la materialización de nuestros sueños, metas y misiones: la primera, con
nuestro propio esfuerzo y la segunda, con la ayuda de Jhvh. En el primer caso,
hay que esforzarse mucho y los resultados nunca satisfarán las necesidades espirituales, aunque se conquisten
naciones.
Si se opta por depositar la
confianza en el Creador, tendremos de nuestra parte a Aquél que todo lo puede.
Este era uno de los secretos del monarca David: -Y Natán
le contestó: “Pues haz todo lo que te has propuesto, porque cuentas con el
apoyo del Señor (2ª de Samuel 7:3).
Cuando entronizamos a Jhvh
en nuestro corazón tenemos todas posibilidades
a nuestro favor para alcanzar el éxito de la misión.
¡ Porque Jhvh es Amor!
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