Al ir más allá del Yo y del Círculo 1, hacemos un inventario del Círculo 2 y enumeramos la Familia Inmediata. Una muestra de este inventario aparece en las últimas páginas. Una página debe ser preservada para cada persona en sus Círculos Concéntricos.
LA FAMILIA INMEDIATA
Su Familia Inmediata serán aquellos que viven bajo su techo. Si está usted lejos del hogar y no casado, su inventario para el Círculo 2 incluirá su madre y padre. Si usted está casado, su Familia Inmediata serán su cónyuge e hijos. El resto de la familia pasará a integrar el Círculo 3, Parientes, que consideramos más adelante en este capítulo.
Si usted no es el canal del amor de Dios para satisfacer las necesidades de aquellos de su Familia Inmediata, olvídese de Afghanistán. Nos preocupamos por los confines de la tierra, si bien no podemos satisfacer las necesidades de nuestras propias familias.
El amor es satisfacer necesidades. Si no estoy permitiéndole a Dios utilizarme para satisfacer las necesidades de mi familia, mi evangelización se vuelve hipocresía. No es de extrañar que no queramos compartir el evangelio con todo el mundo. Si no es auténtico en el hogar, no será auténtico tampoco lejos.
Usted pregunta: “¿Qué tiene que ver esto con la evangelización?” Todo. Dios ha dado el hogar como el contexto en el cual aprendemos a cimentar relaciones.
Permítanme ilustrar. Tengo muchos alumnos que se acercan para decirme:
“Doctor Thompson, no saqué muy buenas calificaciones en la secundaria.
Tampoco me fue muy bien en la universidad.” Entran en mi oficina y lloran.
Dicen: “Quiero entrar en el ministerio. Quiero estudiar el griego y el hebreo, pero no me fue muy bien antes. Ahora, sí haré todo lo mejor posible.”
Yo hago todo lo que puedo para ayudarles, para animarlos. Pero he aquí la tragedia. Esos estudiantes han perdido un fondo en sus conocimientos. No tomaron seriamente los instrumentos que les fueron entregados con los cuales construir el resto de su vida. La educación es una disciplina. La educación es una oportunidad para aprender cómo emplear los instrumentos. Entonces usted puede emplear esos instrumentos el resto de su vida.
El mismo principio se aplica a las relaciones. Si usted pierde la oportunidad de aprender cómo utilizar los instrumentos de relación que Dios le ha dado en el hogar, entonces ha perdido todo.
¿Qué va a hacer? Al pasar por sus Círculos, encuentre un niño que tiene dificultades con la policía. Ya ha tenido problemas consigo mismo. No tiene libertad consigo mismo. Por consiguiente, tiene problemas con sus padres, con sus maestros, con la Providencia. Tiene problemas con todos porque no aprendió las relaciones correctas en su hogar. Si no usamos el hogar como la base para edificar relaciones, hemos perdido todos nuestros instrumentos.
SATISFACIENDO LAS NECESIDADES DE LA FAMILIA. (continuará)
No hay comentarios:
Publicar un comentario