viernes, 23 de diciembre de 2011

EL AMOR DE DIOS PARA CUBA












Pr. Manuel A Morejón Soler. Vedado, La Habana.

Ama y haz lo que quieras. Si callas, callarás con amor; si gritas, gritarás con amor; si corriges, corregirás con amor; si perdonas, perdonarás con amor.

San Agustín (354-430); padre de la Iglesia latina.

El amor de Dios.

Es el amor que Dios expresa por su creación. Un amor absoluto ilimitado y categórico este es el verdadero amor. La medida de Su amor es amarnos sin medida, dándonos más de lo que Él recibe, pero lamentablemente es una triste condición de la humanidad que más se unen los hombres para compartir los mismos odios que para compartir un mismo amor.

Cuando no existía nada, el amor existía; y cuando nada quede, quedará el amor.

¡Es el primero y el último!

El odio es la furia de los débiles.

La furia y el odio con que las turbas procastristas arrollan y pisotean a conciudadanos que expresan de forma pacífica su inconformidad con lo mal hecho y reclamando así sus derechos, no es más que el producto de una doctrina de odios que les han sido insertados desde niños en las escuelas y a través de las organizaciones políticas y de masas, haciéndoles creer que todos los que no piensen igual que ellos son sus enemigos.

Perdónalos Padre, que no saben lo que hacen.

En toda la enseñanza del país se ha sustituido funestamente la palabra odio por la palabra deber, todos los procastristas hablan de que es su deber hacer esto, o su deber de hacer aquello por la Revolución. ¿Y por qué no por una Cuba mejor en la que todos estemos unidos en la diversidad? ¿Acaso por no ser revolucionario se deja de ser cubano?

Los revolucristianos que sí saben lo que hacen, difícilmente serán perdonados.

Ha sido mi experiencia que hasta la iglesia ha sido penetrada y fermentada por el germen de odio o del deber de todo revolucionario. Puede estar Ud. completamente convencido de que esta clase de revolucristianos no puede gozar de la bendición de Dios y difícilmente alcanzará la salvación, salvo que se arrepienta verdaderamente.

¡Padre perdónalos, porque tu no eres odio sino Amor.

¿No pudiéramos tener una ambición más alta que la del deber?

¿No podemos trabajar por Cuba y para Cristo porque les amamos?

Hay un proverbio árabe que reza así: “Al cuello, lo dobla la espada; pero al corazón, únicamente lo dobla otro corazón”. El amor es irresistible.

imorejon@yahoo.es



miércoles, 21 de diciembre de 2011

Hermanas de Mujeres de la Palabra:

Una vez mas; como sierva de Dios nacida en Cuba les escribo pidiendole oracion por mi pueblo ante la brutal represion de la dictadura y el silencio de nuestros lideres evangelicos. Ha sido notorio y con resultados probados el papel de mediador y hasta de denunciante que han jugado lideres evangélicos en distintos paises latinoamericanos, logrando acuerdos y entendimiento entre las partes en conflicto, o cuando a existido represion del gobierno contra el pueblo, pero en el caso de la prision mas grande del continente (CUBA), no escucho el pronunciamiento publico de organizaciones o lideres evangelicos de latinoamerica, y mucho menos de la isla, salvo algunos pocos, y esos estan pagando un precio y en peligro sus vidas en caso de una salida sangrienta de la dictadura militar comunista mas vieja y enganosa de nuestro continente.
Dentro de la isla hay muchas personas en peligro, y estoy atalayando, que de cerrar nuestros labios hoy; es como consentir en la masacre que planean los represores cubanos y es nuestro deber avisar o prevenir para evitar que se derrame sangre inocente, porque si callamos quedariamos como homicidas ante Dios.

Esto no significa inmiscuirse en los asuntos internos de una nacion, esto significa cumplir con los mandamientos de Dios para con nuestro progimo hablando por los que no tienen voz . Le reitero la peticion a que me den la oportunidad de a traves de ENLACE hablarle a la comunidad cristiana latinoamericana sobre la Cuba que ellos no conocen y de la realidad que vive mi pueblo.

Hoy hermana, me levanto sobre mis rodillas intercediendo ante Dios por mi pueblo, y como la reina Ester voy delante del rey y donde sea, y si perezco, que perezca, Ester oro, ayuno, pero tambien se movio y hablo ante el rey asuero en favor de los suyos, y gracias a eso se salvaron y hasta hoy se celebra una fiesta de Purim.

Yo formo parte de Cuba y de los Estados Unidos, no pertenezco a ningun partido politico, ni a favor ni en contra del gobierno cubano; pertenezco a la unidad que forman el Padre, el Hijo, y el Espiritu Santo; me siento con autoridad para hablar del sufrimiento de mi pueblo incluyendo a la comunidad cristiana cubana porque yo sufri en mi propia piel la represion, pague un precio alto por ser cristiana, fui llevada a juicio en la Sala Especial de lo Penal del Municipio de 10 de Octubre, ciudad de La Habana (donde mismo enjuiciaron a Alan Gross, estadounidense enfermo y prisionero en Cuba por entregar telefonos celulares a la comunidad judia) y fui reprendida por orar por Israel, por confesar mi amor por los Estados Unidos, patria de mi padre y abuelos, fui metida en los calabozos en celda fria, humeda, pestilente, tras rejas y candados de la Unidad Policial de Aguilera y Lugareno, en 10 de Octubre, el dia 26 de febreo de 2009; donde querian que a cambio del permiso de salida yo firmara que a mi padre lo asesinaron los estadounidenses en la Base Naval de Guantanamo; le conteste a mis carceleros que la sangre de mi padre no estaba en venta y que Dios es el dueno de mi vida, por tanto no firmaria tal cosa ni dejaria de asistir a la SINA por mis clases de periodismo desde la Universidad de la Florida si ello me dejaban salir de ese lugar, volveria a la SINA, y asi lo hice. Les dije que como que Jesus Cristo esta vivi yo saldria de Cuba junto a mi hijo y ellos serian mis maleteros. Dios respaldo mis palabras; aqui estoy con mi hijo, y ellos (la Seguridad del Estado) fueron mis maleteros.

Le reenvio el comunicado de condena al aumento de la represion en Cuba, firmado por el Comite Panamericano Pro-democracia.

Estoy a su dispocision, en Cristo le saluda y bendice:

Miriam Brown, sierva de Dios.


domingo, 18 de diciembre de 2011

RÉQUIEM A VACLAV HAVEL

Hay una realidad a la que tenemos que enfrentarnos: Algún día moriremos. Sin embargo, Las Sagradas Escrituras nos enseñan que la muerte no es el final de todas las cosas. Los que conocen a Jesucristo, también saben que tienen un lugar de seguridad eterna, un lugar que Jesucristo ha preparado para los que en Él creen (Juan 14:1-4).
En esta vida de una u otra manera sufrimos. Cuando consideramos lo que han tenido que sufrir algunos, nos preguntamos cómo han podido soportarlo. Hay buenas noticias: al margen de lo duro que haya sido el camino, al final hay esperanza de gloria eterna y esto Václav Havel lo tuvo bien claro para poder realizar la obra que consumó para su pueblo, despreciando sufrimientos, dificultades , la persecución, el hambre, el peligro y desafiando hasta la muerte.

Como dice la Escritura:

"Por causa tuya estamos siempre expuestos a la muerte; nos tratan como a ovejas llevadas al matadero."

Pero en todo esto salimos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Debemos estar convencidos de que nada podrá separarnos del amor de Dios: ni la muerte, ni la vida, ni los ángeles, ni los poderes y fuerzas espirituales, ni lo presente, ni lo futuro, ni lo más alto, ni lo más profundo, ni ninguna otra de las cosas creadas por Dios.

¡Nada podrá separarnos del amor que Dios nos ha mostrado en Cristo Jesús nuestro Señor!

Romanos 8:35-39

Je pravda pred kterou jsme postaveni: Jeden den zemreme. Presto Pismo Svaté nás uci, ze smrt není nasí poslední cestou. Ten kdo zna Jezise Krista také vi, ze má své misto na vecnosti, místo, které Otec priprail pro ty jez v Nej veri. (Jan 14: 1-4)

V tomto zivote kazdy nejak trpí. Kdyz si uvedomíme co museli nekterí vytrpet, ptáme se sami sebe jak to mohli prezit. Ale dobrou zprávou je ze: ackoli cesta byla jakkoli tvrdá, na konci nás ceká vecná sláva a to Vñaclav Havel dobre vedel, vytvoril dílo predané svému lidu nedbajice utrpení, prezekuce, hladu, nebezpecí a dokonce ani smrti.

Dle Písma Svatého:

Kdo nás odloucí od lásky Kristovy? Snad souzení nebo úzkost, pronásledováni nebo hlad, bida nebezpeci nebo mec?

Jak je psáno:

“ Denne jsme pro tebe vydáváni na smrt, jsme jako ovce urcené na porázku.”

Ale v tom ve vsem slavne vítézime mocí toho, který si nás zamiloval. Jsem jist, ze ani smrt ani zivot, ani andelé, ani mocnosti, ani pritomnost ani budoucnost, ani zádná moc, ani vysiny ani hlubiny, ani co jiného v celém tvorstvu nedokáze nás odlucit od lásky Bozi, která je v Kristu Jezisi, nasem Panu.

(Rímanum 8: 35-39)