miércoles, 10 de agosto de 2011

Pastores por la paz dicen lo que son.


 

 Por Rev. José Carlos Pérez. La Habana.

El viernes 22 de julio arribó a la Habana la  Caravana XXII de Pastores por la Paz en campaña de solidaridad "con la Isla". Su visita manifiesta lo que son.


A su llegada fueron recibidos por las autoridades políticas cubanas. Estos los conducen y custodian todo el tiempo a fin de mostrar "la realidad cubana" a los religiosos  "deseosos  de conocerla".
Con seguridad los visitantes extranjeros no toman el trasporte popular, ni su estancia depende de las mismas condiciones económicas normales  del pueblo cubano.
Su programa de visita es de carácter político, no religioso. En la provincia de Matanzas se reunieron con combatientes de Playa Girón - Bahía de Cochinos  - y en la provincia de Pinar del Rio visitaron a la familia Malagón quienes constituyeron un destacamento para cazar a los alzados anticastristas.
Los caravanistas protestan por las "restricciones" del gobierno norteamericano, que son "más duras", pero no reparan en la libertad de expresión   que ellos  gozan en su país. Se les permitió "visitar más de 130 ciudades y realizar actos públicos y encuentros con la prensa".
Muy diferente a estos religiosos norteamericanos; europeos y canadienses  que visitaron la Isla, los cubanos en general, religiosos o no, carecemos legalmente de el derecho de expresar criticas   " en la prensa y actos cívicos públicos"  en cuestionamientos al gobierno sobre su política nacional.
Las donaciones humanitarias -" más de 100 toneladas que incluye medicamentos, computadoras, material escolar, paneles solares portátiles y 14 vehículos "- llegan directamente a manos del gobierno y  poco o nada alivian la miseria nacional y si a unos pocos religiosos progubernamentales al que algo les  dejan.
Elocuente es el hecho que se develara una tarja conmemorativa a Lucios W. en la Tribuna Antiimperialista en la Habana y la custodia de sus cenizas como acto de su última voluntad para que reposen por siempre en la Isla.
Bien se cumple las palabras de nuestro Señor: "Así como el cadáver putrefacto atrae sobre si los buitres comedores de carroña" Lucas 17:37, Pastores por la Paz dicen lo que son.  
 
 
 
 

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